El pasado miércoles 15 de febrero de 2017 en el aula del Máster en Comunicación Científica, Médica y Ambiental de la Universidad Pompeu Fabra – Barcelona School of Management (UPF-BSM) se llenó de estudiantes y participantes debido a la mesa redonda. ¡Y con razón! El tema elegido Gema Revuelta, directora del Centro de estudios de ciencia, comunicación y sociedad de la misma universidad (CCS-UPF) y codirectora del máster, planteaba la famosa cuestión: ¿la Ciencia ya ha descubierto lo esencial o aún estamos frente a « un océano de verdades por descubrir », como formulaba el físico Newton en el siglo XVII? Es sobre lo que nos han hablado los tres ponentes al presentarnos su campo de investigación y sus posibilidades de futuro.
Frente a un público quieto y atento, el Dr. Felipe Gómez Gómez, responsable del grupo de Habitabilidad y Ambientes Extremos del Departamento de Planetología y Habitabilidad del Centro de Astrobiología del CSIC (Madrid), empieza la charla. Nos explica los estudios que realiza su equipo, relacionados con el origen de la vida, sus límites, y la posibilidad de vida fuera del planeta Tierra. El Dr. Gómez destaca que la primera dificultad es ¡definir el concepto mismo de vida! « ¿Consideramos los virus como seres vivos? », « La vida en otro planeta ¿podría ser algo muy diferente de lo que conocemos en la Tierra?» preguntan dos de los participantes. « Pues es una de nuestras mayores dudas », confiesa el Dr. Gómez: « si encontramos vida fuera, seremos capaces de reconocerla ?… ». Con mucha pasión, nos habla de Curiosity, el « laboratorio-robot » más moderno que se ha enviado a Marte con objetivo de hacer una descripción geoquímica del suelo y sobre todo de buscar agua líquida, el elemento clave que condiciona la presencia de vida. « También participamos en un proyecto de estación medioambiental, el REMS, que se va a enviar en 2020 (…) es un reto tecnológico muy grande ». « Es prudente hablar de temas como el origen del Universo y el origen de la vida? » inquiere un estudiante. « En cuanto a la formación del Universo se tiene que teorizar, pero sí se puede llegar a descubrir cómo era la Tierra primitiva y entender este proceso físico-químico que llamamos vida (…) Y es muy interesante comunicar sobre el tema, dado que hay avances muy interesantes », sostiene el Dr. Gómez. De hecho, se llevan a cabo estudios por ejemplo en el Rio Tinto, un medio que se parece mucho a Marte. También está previsto que se desarrollen unas misiones en un sitio en Etiopia que es muy prometedor. « ¡Hay que investigar, que nos queda tanto por descubrir! (…) Incluso al día de hoy algunos científicos piensan que es imposible que no haya vida fuera…».
Con esta frase concede la palabra al Dr. Sergi Valverde, responsable de la línea de Evolución Tecnológica del laboratorio de investigación de Sistemas Complejos, que pertenece al Departamento de Ciencias Experimentales de la UPF y al Instituto de Biología Evolutiva (Barcelona). Este campo de investigación bastante novedoso tiene como objetivo de entender los orígenes de la innovación en los sistemas tecnológicos, haciendo énfasis en las redes de información. La evolución tecnológica es una parte importante de la cultura y permite incrementar las capacidades de la sociedad más allá de lo que consigue cualquier otra especie. Pero todavía queda mucho para establecer una teoría cuantitativa del cambio tecnológico, sobre todo cuando se compara con la teoría de la evolución biológica de Darwin. « Construimos mapas de relaciones entre diferentes elementos » explica el Dr. Valverde. « Luego se analizan para encontrar algún patrón. Miramos las distancias entre los elementos, al igual que se miran las distancias entre los genes, y edificamos ‘arboles filogenéticos’ en 3D ». Después, se interpretan estas figuras: « se nota que algunas innovaciones tienen más impacto que otras. Las que menos impacto tienen se van eliminando, por analogía con los seres vivos frente a la selección natural. Los investigadores esperan poder usar los resultados del proyecto para optimizar los algoritmos de búsqueda. « Nuestro objetivo a largo plazo sería mejorar los motores de búsqueda de las bases de datos, y desarrollar métodos sistemáticos para la predicción de las innovaciones. », nos confía el Dr. Valverde.
Seguimos nuestra exploración de los campos de investigación con la Dra. María García Parajo, responsable del grupo de Biofotónica de moléculas individuales del Instituto de Ciencias Fotónicas (ICFO, Castelldefels). Se aplican conceptos físicos a procesos biológicos a nivel molecular que tienen implicaciones en el desarrollo de enfermedades. El grupo, cuyo lema es « ver para creer », despliega técnicas ópticas avanzadas (resolución de 10 a 20 nanómetros) que permiten ver moléculas individuales de las membranas celulares. Así se pueden estudiar fenómenos como la captura del VIH por las células detríticas. También se llevan a cabo estudios sobre inmunoterapia contra el cáncer. « Es una ventana abierta al mundo manométrico », afirma la Dra. García, muy entusiasta. « Existen relaciones entre vuestras disciplinas? », cuestiona una de las oyentes. « La tecnología en general es comúnen todos los ámbitos », contesta la Dra. « Los conceptos se repiten a escalas diferentes, como fractales », « la visión tradicional de los campos separados es un problema, hay que romper fronteras », añaden los Dr. Gómez y Valverde. « Cómo se decide hasta donde vais en las investigaciones, ¿cómo gestionáis vuestra curiosidad? », quiere averiguar otra de las participantes. « Nunca se sabe donde te pueden llevar las investigaciones, yo no me pongo límites », asevera el Dr. Valverde. « Uno de los retos más difíciles es gestionar esta curiosidad, pues lo de ser el primer hombre estudiando algo es muy gratificante », nos cuenta el Dr. Gómez.
Los tres ponentes están de acuerdos sobre un hecho: aún nos queda muchísimo por descubrir. « Hay que investigar en los campos en los que menos se sepa » opina el Dr. Valverde. « Hace falta perderse para encontrar, el no entender te permite intentar entender conceptos nuevos », dice la Dra. García. « Cuando se exploran los ‘temas-fronteras’, allí se necesita la colaboración » según el Dr. Gómez. En efecto, todos los ámbitos son muy relacionados entre sí y la multidisciplinareidad, más que un recurso, se ha convertido en una necesidad para la investigación. « Muchas gracias, muy inspirador », expresa una chica al final del debate. El reto está cumplido: hemos salido del aula con más preguntas en la cabeza que al entrar.
Linda Chab
Estudiante en prácticas
Máster en Animación, Comunicación, cultura y Enseñanza de las Ciencias Naturales (Universidad de Montpelier)
Este blog cuenta con la colaboración de la Fundación Española para la Ciencia y la Tecnología – Ministerio de Ciencia e Innovación